La regresión es un tipo de terapia popularizada por el Dr.Brian Weiss en el que revivimos momentos traumáticos de nuestro pasado para conocerlos, entenderlos y desbloquear los posibles efectos que puedan estar provocando en nuestro presente. El objetivo es encontrar la fuente de nuestros bloqueos emocionales, comportamientos o problemas actuales, para trabajar con ellos desde la luz de la consciencia, liberándonos de su efecto “condicionante inconsciente”.

 

A nivel oficial, se sabe que la hipnosis o relajación profunda puede ser útil para reestructurar mejor los detalles de los recuerdos que ya teníamos, sin embargo, no se ha demostrado que los recuerdos que estaban enterrados y surgen durante la regresión sean ciertos. La investigación sobre el campo de la memoria la muestra como reconstructiva (la creamos), no es reproductiva. Al no tener soporte en el conocimiento científico actual, la regresión es considerada una “pseudoterapia o pseudociencia”.  Sobre todo, si la persona afirma haber accedido a recuerdos de “vidas pasadas”, como ocurrió con la primera y sucesivas pacientes del Dr.Brian Weiss documentadas en su bibliografía. Si la reencarnación existe o no, depende del mundo de las creencias individuales de cada persona, la ciencia no puede demostrar que así sea, al menos de momento.

 

Dicho esto, hacer una terapia regresiva significa que estás dispuesto a trabajar con información de tu inconsciente, con lenguaje a veces simbólico. Desde Psicomind tratamos esta información con la misma actitud que el trabajo con los sueños. Cada regresión contiene información valiosa, única y personal, relacionada generalmente con el origen de algo que te produce malestar. Se trata de “conectar con el inconsciente, para mejorar el presente”. Desde un respeto por las creencias de cada persona, nuestro interés se centra en la información que nos proporcionan las regresiones y todo lo que podemos hacer con esa información y las emociones que están asociadas a ellas. Nuestro foco está dirigido siempre hacia la obtención y refuerzo de los recursos que ayudarán a incrementar el bienestar emocional y mental de la persona que tenemos delante.

 

Las regresiones se pueden utilizar puntualmente dentro de un proceso terapéutico si lo consideramos necesario, pero también puede ser el eje central en trabajos de crecimiento personal cuando las personas lo solicitan. En este último caso utilizamos el método de B.Weiss/C.Sanmiguel.

 

Las regresiones se desaconsejan para personas con determinado tipo de diagnóstico clínico como pueda ser, entre otros, un trastorno límite de la personalidad, psicosis, esquizofrenia…. O durante periodos de elevadas dosis de medicación.